Despues de perderlo, nunca pense que volveria a sufrir asi.
Perder a mi padre porCOVID-19, es otra muerte extrana en la que no pude despedirme en persona.
Fue muy dificil pasar por esto como enfermera.
Mi papa, Prudencio Lemagne, fallecio el 20 de abril.
Solo tenia 75 anos.
Fueincreible la cantidad de pacientescon COVID-19 que tuvimos en el hospital.
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Era una figura paterna para muchos y el tipo de persona que siempre estaba ayudando a los demas.
Entonces, cuando COVID-19 llego, el comenzo a repartir agua, gel desinfectante y mascarillas a la gente.
Le adverti que no saliera, pero el estaba convencido de que mi hermano David lo protegeria.
No quiso decirme cuando se enfermo porque sabia que me afectaria mucho.
Instinto de enfermera
Inmediatamente asumi mi papel de enfermera.
Llame al medico y obtuve una receta para hidroxicloroquina, el medicamento que estaban usando en ese momento.
Yo estaba monitoreando la situacion en casa y le administraba oxigeno suplementario.
No permitian la entrada de visitantes regulares para nadie, punto.
Una vez que ingresas con COVID-19, ya no hay mas visitas.
Me siento agradecida de ser enfermera y haber podido visitarlo.
Todo el mundo tenia miedo.
Los enfermeros y enfermeras tenian miedo.
Los auxiliares de enfermeria tenian miedo.
Ciertas cosas que note, como la falta de agua en su jarra, comenzaron a molestarme mucho.
Llamaba cada cuatro horas para que me informaran.
Conocia a algunas de las enfermeras y ellas tenian mi numero.
Les dije que me llamaran de inmediato si pasaba algo.
Aproximadamente una semana antes de que muriera, me quede dormida en el sofa.
Eran las 2:03 a.m. y me desperte con varias llamadas.
La enfermera me pregunto si yo estaba de acuerdo con sus planes medicos y yo les dije que si.
En ese momento me conecte via FaceTime con el.
Papi me miro y dijo: Voy a estar bien.
Cuida a tu mama.
Esas fueron sus ultimas palabras.
El 17 de abril, tres dias antes de su fallecimiento, recibi una llamada del medico.
Papi no estaba mejorando.
Quiero que vengas a ver a tu papa, me dijo.
Me vesti con la bata de proteccion personal y entre al cuarto.
Cuando estas conectado a un respirador, te sedan para que no luches contra la maquina.
Llegue alrededor de las seis de la tarde.
Tan pronto como comence a hablarle, comenzo a agitarse y a luchar contra la maquina.
Abrio los ojos y comenzo a toser y ahogarse.
Hemos estado esperando a que se despierte todo el dia, dijo el medico.
Y decidio esperar hasta que estuvieras aqui.
Le dije que todos lo amabamos.
Le dije que estaba haciendo todo lo posible para cuidarlo.
Le pedi que siguiera luchando.