El perro es viejo.
Sin darse cuenta, ha envejecido.
Quizas tambien me pase lo mismo, si tengo suerte.
Quizas ya me ha pasado.
Tiene dientes brillantes; un hocico negro; un pelaje plumoso.
Rebota un balon de futbol con el hocico.
En la calle, todos se enamoran de el.
“Tu perro es tan hermoso!
Cuantos anos tiene?”
Se asombran al oir su edad.
Y asi es, ano tras ano.
Es eterno; es inmortal.
Pero echemos una segunda mirada.
Cuando corre, lo hace con las patas rigidas.
En la profundidad de sus iris se acumulan nubes cataratas, me informa un amigo oftalmologo.
“Es viejo”, le digo a todos los que me preguntan.
“Es un anciano”.
“No es asi?
Quien es un anciano?”
El perro alza su mirada.
Membresia de AARP: $15 por tu primer ano cuando te inscribes en la renovacion automatica.
Con frecuencia sus vidas se prolongan a traves de costosas intervenciones medicas.
Promislow y sus colegas esperan descubrir los factores que les permiten a ciertos perros eludir estas indignidades.
Se espera que si funciona para ellos, funcionara para nosotros.
Duerme mejor y pesa menos
No sabemos exactamente cuantos anos tiene el perro.
Era lo que hoy en dia los sociologos denominarian un adulto emergente.
Esto resulto ser conveniente, ya que yo tambien era uno.
Sencillamente pense que sonaba gracioso.